miércoles, 24 de enero de 2018



Quién sos
y por qué te miro
estar en mi cama
adonde yo te invité
y te la adueñás
como un bebito
rabioso
que ya tomó la teta
y tiene la panza llena
y el corazón contento
y yo miro
desde el vidrio de la desgracia
-porque es ese mi lugar común-
las venas de mis ojos secarse.