domingo, 4 de enero de 2015


Si dejo de llenarme la boca
para asumir el silencio
y vuelvo a encontrar
la quietud en dos brazos,
el mal de la belleza
todavía me infecta.



sábado, 3 de enero de 2015


ahora me acuerdo:

soñé una laucha
atorada
en la rejilla de una vereda

su cuerpo vertical
curvándose hacia atrás
y sus patitas 
nadando en el aire

no se le veía la cabeza